Los after-office o “afterwork” son importantes para que los equipos se conozcan más, entren en confianza y luego, puedan afianzarse como grupo ya que, ese clima de bienestar y de seguridad hacia el interior, se traslada a lo laboral.

Probablemente a una persona le sea más fácil pedir ayuda a su líder, si la semana anterior estuvieron jugando al Among Us o tomando una cerveza y riendo. Incluso, a alguien le nacerá usar una hora de su día para ayudar a otra persona a destrabar alguna cuestión técnica que le dificulta completar su tarea en pos de alcanzar objetivos colectivos.

Los encuentros después de la jornada laboral son esenciales para construir sentido de pertenencia y confianza, y para ayudar a liberar el estrés.

En este artículo te contaremos qué son los after-office virtuales, por qué son importantes y te daremos ejemplos de qué actividades se pueden realizar para que puedas jugar con tu equipo.

En este artículo:

En XOOR, el último jueves del mes nos encontramos en Google Meet para darle la bienvenida a quienes se hayan sumado a la compañía en las últimas 4 semanas y jugar algún juego virtual como el tutti frutti, una sala de escape o pictionary.

El encuentro comienza con un ping pong unidireccional para conocer a los nuevos integrantes: saber desde dónde trabajan, con quién viven; cuál es su lugar en el mundo o el superpoder que les gustaría tener.

Luego llega el momento de ¡jugar! A veces la propuesta es grupal, en otros casos es individual. Intentamos variar continuamente la modalidad y la actividad lúdica para entusiasmar y entretener a las y los colaboradores.

¡El after-office está lleno de sorpresas! A veces hay premios para quienes ganan el juego del día y en otras ocasiones compartimos un obsequio que la empresa envía a nuestros domicilios como un cuarto de helado, o un café con torta.

Por otro lado, realizamos cada quince días un #ViernesDeSelfie para conocernos mejor ya que las consignas invitan a todo el equipo a compartir alguna foto de algún momento actual o pasado y a relatar el contexto de la misma. Por ejemplo, pedimos que nos cuenten cómo son en la cocina y pedimos que compartan una imagen del último plato que cocinaron; o cómo fue su primer día de clase acompañado por un retrato de ese entonces. También aprovechamos días especiales para ajustar las consignas: en el día de las maternidades, invitamos a que nos cuenten algo de sus madres; o en el día de las niñeces que lo repliquen con sus hijos e hijas.

Lo importante es mantenernos continuamente en la búsqueda de actividades que fomenten el conocimiento mutuo y la diversión.

Si te estás preguntando qué significa “after office” en español o “afterwork”, te contamos que quiere decir “después de la oficina” y alude a encuentros informales después de la jornada laboral, y representan una oportunidad para distenderse de las obligaciones y afianzar vínculos con coworkers.

Para las empresas que trabajamos en forma remota, es necesario propiciar estrategias para relacionarnos y forjar lazos dentro del equipo. No tenemos cruces de pasillo o en la fila del baño, ni tampoco la hora del almuerzo compartido.

Por eso, en XOOR llevamos a cabo distintas actividades online que tienen como objetivo reunirnos fuera de lo estrictamente laboral.

Estos encuentros permiten relajar la tensión de la rutina y conocernos en una dimensión personal, más allá de lo laboral o profesional. Son varios los beneficios que nos aporta un after-office:

Cuando no conocemos personalmente con quienes trabajamos, y la mayoría de los intercambios laborales ocurren a través de un chat, tenemos más propensión a creer que alguna recomendación o sugerencia es una órden; que un simple comentario fue de mala gana; y que una respuesta tardía es desinterés. Los mensajes no tienen tono, y si no conocemos lo suficiente a su emisor, solemos completarlo en el cerebro y a veces no elegimos el sentido real.

Pero, si conocemos a esa personas en ambientes distendidos de modo que podamos conocer aspectos de su personalidad, entender sus trasfondo, cómo es cuando hace chistes, cómo habla cuando está bajo presión, cómo es cuando habla seriamente, y cómo cuando nos dice algo por nuestro bien, tendremos más herramientas para interpretar el tono real del mensaje y así, evitaremos incurrir en malos entendidos y roces dentro del equipo.

En XOOR solemos probar diferentes juegos para ver cuáles gustan más e intentamos sorprender en cada oportunidad con propuestas novedosas, pero hay algunos que ya se convirtieron en clásicos.

A continuación te contamos 6 opciones para que pruebes con tu equipo de trabajo:

Es importante señalar que estos son los que usamos habitualmente en XOOR, pero hay una infinidad de opciones en internet. También hay empresas que se dedican a brindar opciones pagas para entretener a los equipos de manera virtual.

Las empresas que realizamos los after office de manera virtual tenemos un gran desafío: lograr que, luego de 8 horas de trabajo frente a una pantalla, las personas quieran sumar 1 o 2 horas más frente a algún dispositivo digital para una actividad recreativa.

Para sortear esta dificultad en XOOR decidimos incluir el after-office mensual, dentro del horario laboral. De esa manera, no tendrán que disponer tiempo a cuestiones del trabajo.

Al hacerlo nos encontramos con un nuevo problema: las y los colaboradores tienen asignadas responsabilidades para que los proyectos salgan adelante entonces prefieren la productividad por sobre el ocio. Les es más importante cerrar un ticket, o planear las tareas de la próxima semana y consideran una “pérdida de tiempo” jugar. Por eso es muy importante transmitirle a quienes lideran las áreas para que hagan extensivo al resto del equipo, la importancia de los espacios de after office para construir la cultura de la organización, para entendernos y crear un ambiente laboral ameno.

Otro obstáculo al que nos enfrentamos es definir un día y hora en la que puedan participar las y los colaboradores. Cuando somos un grupo voluminoso y trabajamos en proyectos diferentes, e incluso con clientes que tienen otro huso horario, resulta difícil coincidir. Advertimos que los viernes no son una buena alternativa porque por lo general las personas quieren finalizar sus tareas y comenzar el fin de semana; del mismo modo tampoco lo es un lunes porque suele ser una jornada cargada de responsabilidades. Nuestra solución es ir identificando dos o tres opciones de día y hora en los que puedan la mayoría, e ir alternando cada mes.

Finalmente también recomendamos al momento de calendarizar tareas, estimar tiempos y recursos, tener presente que las actividades de organización interna son importantes y que, si bien no se relacionan directamente con los proyectos, son indispensables para su éxito. Por ejemplo reuniones diarias de organización, otras periódicas para dar feedback; mensuales para fomentar el trabajo en equipo como el after-office. Calcularlos como horas “ocupadas” ayudará a que las y los colaboradores sean más participativos en el after-office.

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